¿YO? ¿Sentir ansiedad?
Puedo asegurarte que en estos días en los que nuestra manera "normal" de vivir fue afectada drásticamente tuvimos algunos síntomas de ansiedad y los pasamos por alto; puede que hayas tenido sensación de stress, una leve aceleración del ritmo cardíaco y respiratorio, tensión muscular, las palmas de las manos sudan, un malestar en el estómago y temblor en las manos y las piernas.
Algunos de estos síntomas pude percibirlos... Y me pregunté ¿Porqué tengo miedo de lo que pasará?
Y algunas de las preguntas que según la OMS (Organización Mundial de la Salud) se han reportado ultimamente son:
¿Qué va a pasar? ¿Me contagiaré? ¿Tendré trabajo? ¿Cómo estará mi madre, mi familia? ¿Los volveré a ver?
Y está bien sentirse preocupado, por más espiritual que seas o por el cargo en un ministerio que tengas NO ESTÁ MAL que sientas incertidumbre; ¡Somos Humanos!.
Lo que nos diferencia como cristianos es que tenemos esa esperanza en CRISTO y muchas promesas de Dios para nuestra familia.
2 Crónicas 20:17 me impresiona que dice “En este caso, ustedes no tienen porque pelear. Simplemente quédense quietos, y contemplen como el Señor los va a salvar.” (RVC). Respira, confía, y observa.
Cuando un ataque de ansiedad llega, recuerda estas preguntas de Dios para ti: ¿Por qué tienes miedo? ¿Por qué te preocupas? ¿Acaso no confías en mí? ¿Hay tan solo una cosa que esté fuera de mi control?. La ansiedad proviene de un lugar de pérdida de control, pero en Mateo 6:27 dice: “¿Quién de ustedes, por mucho que se preocupe, puede añadir una sola hora al curso de su vida?” (NVI). El preocuparse y abrumarse no tiene, ni tendrá resultado alguno porque nada está bajo nuestro control.
Por eso, Dios nos llama a entregarle nuestras preocupaciones a Él, a descansar en su poder y en su verdad. El único que tiene todo bajo control y capacidad de calmar las aguas, es Jesús.
Poco a poco, dejé de lado las noticias, alertas, cantidad de contagiados y toda la información que no me edificaba, al contrario me generaba sensación de preocupación y expectativa de lo que pasará mañana.
Lo que me ayudó mucho fue retomar esas lecturas biblicas y enseñanzas, Palabra de Dios que cada día renovaba mi fe y entregar esa carga (que no nos pertenece) a Dios; pidiendo con fe y reconociendo que todo lo que pasaría sería su voluntad; y es así como hemos logrado ver que en estos tiempos su favor ha estado con nosotros TODOS LOS DIAS.
Te invito a que en esos momentos de ansiedad, busques una alabanza o una lista de alabanzas en las que puedas recordar sus promesas y lo GRANDE de su Poder.
Los siguientes versículos tienen promesas increíbles para ti:
- “Jehová es tu guardador; Jehová es tu sombra a tu mano derecha.” Salmos 121:5
- “Jehová está conmigo; no temeré lo que me pueda hacer el hombre.” Salmos 118:6.
- “Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento.” Salmos 23:4.
- “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.” Josué 1:9.
- “¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre. Pues aun vuestros cabellos están todos contados.Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos.” Mateo 10:29-31.
- “Y mirándolos Jesús, les dijo: Para los hombres esto es imposible; mas para Dios todo es posible.” Mateo 19:26.
- “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.” Hebreos 11:1.
Y recuerda, si pasastes por estos síntomas de ansiedad, todo este proceso te ayudará a edificar también a aquellos que están lejos de Dios, hablemos de Jesús, hablemos cada día de su amor.
Cristina Gutiérrez de Sánchez